Cómo crear una empresa de coaching

El coaching se importó de Estados Unidos a finales de los años ochenta. Actualmente, se enfrenta a una demanda creciente en muchos sectores de actividad. Inicialmente reservada a los deportistas, hoy responde cada vez más a las exigencias del mundo de los negocios y del sector privado.

El coaching tiene el viento a favor

El coaching está en alza y la formación en este campo es muy popular. Inicialmente reservado a los deportistas, el coaching se ha adaptado desde hace unos años a las exigencias de las empresas para sus directivos, así como a las demandas de apoyo a los proyectos. La moda del coaching no deja de conquistar nuevos mercados, sobre todo en los ámbitos privado y familiar. El coaching de imagen, a veces también llamado automarketing, es una de estas nuevas tendencias. Al mismo tiempo, la profesión se organiza y los cursos privados de coaching son cada vez más numerosos. Incluso las universidades han creado un curso específico de coaching. Además, varias organizaciones profesionales como ICF France, SFCoach, Syntec en évolution professionnelle, AFIPP, RIC, etc. intentan federar a los coaches en Francia y codificar las normas de la profesión. La tendencia actual es buscar la respetabilidad y promover la necesaria acreditación de los entrenadores.

Coaching empresarial, ¿cómo funciona?

Si acaba de iniciar su negocio de coaching y aún no tiene clientes, tiene razón al creer que el coaching es una actividad fantástica, útil y gratificante. Te formaste en coaching porque era tu sueño, tu proyecto profesional y haces bien en creer en ello. Dedicarse al coaching significa comprometerse al 100% con el desarrollo y la sostenibilidad de su negocio de coaching. Este compromiso significa que le dedicará recursos, tiempo, energía y dinero, con especial atención a la estrategia y la táctica. Para tener éxito en la empresa, las actividades de coaching deben planificarse y organizarse cuidadosamente. Ya sea en un simple calendario o en un smartphone, tu agenda debe estar siempre a la vista. Tu tiempo es, en efecto, tu bien más preciado y una buena gestión del mismo te revelará tesoros. Además de las franjas horarias reservadas al coaching, planifica las demás tareas de tu nueva empresa: tiempo de administración, redacción y marketing. Evita tener una agenda vacía, ya que es más probable que te distraigas con cosas que roban energía a tu negocio.